Reforma integral y accesibilidad son dos aspectos a tener muy en cuenta cuando vivimos una etapa de nuestra vida en la que tenemos, o hemos de considerar, posibles limitaciones. Puede que hoy esas limitaciones sean menores, pero la reforma de nuestra vivienda ha de durar años. Por tanto, la previsión es realmente importante.
Aquí te contamos cómo conseguir que tu vivienda sea más segura y te aporte más autonomía tras la reforma integral.
Elementos fundamentales para hacer tu vivienda accesible
Para conseguir una reforma integral de tu vivienda que la convierta en más segura y aumente tu autonomía, presente y futura, hemos de tenerlo en cuenta desde el momento de proyectarla.
El proyecto adecuado nos permitirá realizar un diseño que adapte y modifique el espacio, conjugando perfectamente reforma integral y accesibilidad.
Facilidad de movimiento
Hemos de poder movernos sin impedimentos a lo largo de toda la vivienda. Esto empieza desde la puerta de entrada hasta los pasillos y pasa por las puertas y accesos interiores. Deberían de disponer de una anchura mínima de 80 cm para poder desplazarse con un andador o una silla de ruedas.
Además, en todas las estancias, hemos de diseñar la distribución de los muebles pensando en que las zonas de paso han de permitir también el libre movimiento con silla de ruedas o andador.
Por supuesto, la altura y ubicación de interruptores, enchufes y cierres de puertas y ventanas ha de ser la adecuada para poder alcanzarlos, incluso desde una silla de ruedas.
El baño es una de las estancias más delicadas a la hora de pensar en la accesibilidad. Será necesario que prescindas de la bañera y optes por una ducha. Además, el inodoro debe de ser alto y disponer de barras de sujeción. La puerta del baño deberá incorporar un pestillo que pueda abrirse desde la parte exterior para poder entrar en caso de una caída.
Si tu vivienda tiene escaleras, te recomendamos que realices las adaptaciones necesarias para poder instalar un elevador. Elige el que mejor se adapte a tu espacio, ya sea ahora o en el futuro. Además, si la distribución de tu vivienda lo permite, has de ubicar en la misma planta las estancias de mayor uso, incluyendo el dormitorio, para evitar tener que utilizar las escaleras de forma habitual.
Estancias seguras
La reforma integral deberá eliminar los elementos inseguros de tu vivienda.
Así, el suelo de toda la vivienda ha de evitar que puedas resbalar con facilidad. Las zonas como la cocina y el baño son especialmente sensibles en este aspecto, por tanto merecen una mayor atención. Habrá que elegir materiales antideslizantes para la ducha, por ejemplo. También las escaleras son otro punto de atención y requerirán de la colocación de bandas antideslizantes en cada peldaño.
En la cocina también recomendamos que instales una vitrocerámica de inducción, que evitará quemaduras en caso de apoyarte de forma involuntaria.
También han de evitarse distintas alturas en el pavimento que puedan causar tropiezos o dificultar el paso de sillas de ruedas o andadores.
Hay muebles que pueden formar parte de la reforma integral, como son los armarios o las estanterías. Un armario empotrado bien ubicado, evitará tener un mueble que puede ser causa de tropiezos, mientras que una estantería de obra, en caso de que te apoyes en ella, no cederá, evitando así una posible caída.
Muebles y accesorios adecuados
En general, los muebles han de estar bien elegidos para que su uso sea seguro y te permita moverte con facilidad. Así, te recomendamos lo siguiente:
- La cama ha de tener una altura media que permita subir y bajar sin esfuerzo.
- Los armarios no han de ser muy altos.
- Evita alfombras y moquetas.
- Los muebles deben de tener cantos redondeados.
- Los sofás y butacas han de ser altos, así te resultará más fácil levantarte.
- Las sillas deberían de tener un respaldo de media altura y brazos.
Estas son algunas de los consejos que te damos desde Construhogar si estás pensando un en reforma integral considerando la accesibilidad de tu vivienda.
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